Haciendo historia en la PNL
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10/04/2018¿Es posible Transformar las preocupaciones en otra cosa?
La palabra pre-ocupación= Ocuparte antes del momento que toca.
Las preocupaciones pueden ser tantas que empiecen a afectarnos, colapsando nuestros pensamientos y haciendo que nuestro cuerpo se resienta, aparezca el cansancio e incluso el dolor en sitios concretos. Cuando las preocupaciones perduran en el tiempo, afectan a nuestra salud.
Es fácil que te digan que te dediques a las ocupaciones, al momento y a realizar lo que dependen de tí. ¿Pero es fácil hacer lo mismo de siempre de otra forma? Cuando todo nuestro ser está acostumbrado a hacer de forma instantánea de una determinada forma…. pues como que cuesta hacerlo solos. Entonces ¿cómo hacer? En sesiones personales de coaching con PNL, la persona puede encontrar nuevas formas y entrenarlas. A veces un pequeño cambio en un comportamiento o un cambio de palabra producen el empuje a transformar las preocupaciones. Coger a tiempo la preocupación, lleva consigo la rápida mejora de los síntomas que la acompañan.
La Maravilla del cambio.
No suelo utilizar la palabra cambio, pues muchas personas se guardan de ser cambiadas y hacen bien. Muchos hablan de nuestra resistencia al cambio como algo negativo pero nada más lejos. Esta resistencia es necesaria para el equilibrio homeostático de nuestro cuerpo y de nuestro ser. ¿te imaginas estar cambiando contínuamente y en cada instante? ¡Vaya mareo! Estamos programados para estar centrados y con el menor gasto de energía posible.
La PNL permite a las personas hacer pequeños cambios en la sesiones personales, ya que en muchas ocasiones el gasto de energía para nuestro cuerpo es mínimo y el equilibrio es rápido de recuperar. Con estas sesiones, menos es más: menos tiempo significa mayor energía para emprender sus objetivos o sus tareas.
Aunque lo sé, me sigo sorprendiendo en cada sesión con PNL. Nada que ver cómo entran las personas y cómo salen. Muchos me preguntan si se puede observar cambios en una sola sesión. ¿Si se puede? Ya lo creo. Me gustaría disponer de una cámara que no sólo reflejara las facciones de las personas si no también su energía… ¡es tan diferente! Son pequeñas diferencias que hacen un todo en la disposición de la persona hacia su vida cotidiana.
En una de mis últimas sesiones, Mirella, llega encogida y me dice que no sabe si va a poder hablar pues su boca está llena de llagas y su mandíbula bloqueada. Empiezo a utilizar las pocas palabras que lanza como en un partido de tenis. Algunas rebotan y la partida va avanzando en sus sets. Voy haciendo para que el juego sea equilibrado y poco a poco deja de ser un partido para convertirse en suaves olas que nos llevan a encontrar recursos en el mar infinito de posibilidades.
La mezcla de lenguaje, metáforas y coaching wingwave hacen maravillas y Mirella empieza a hablar, su rostro se inunda de suaves colores y los ojos empiezan a lucir como dos lunas llenas. Poco a poco el vaso de agua va desapareciendo entre sus labios.
Florecer con PNL
No sé si a esto se le puede llamar milagro. Al finalizar la sesión le pregunto por sus llagas ¿llagas? Ah si… y sorprendida se toca con la lengua buscando las heridas y me dice que le molestan muy poco. Su silueta sale moviéndose como una niña que acaba de estrenar zapatos nuevos.
Dos semana más tarde volvemos a nuestro encuentro donde los objetivos fluyen en imágenes reales y concretas.
¿Cuantas horas de llevar la atención al sufrimientos hemos evitado en tan solo dos encuentros?
No lo sé… pero sí sé que ahora hay otro camino para Mirella.
En una sola sesión, al transformar la preocupación en otra cosa, las llagas pasan a segundo plano. Su mensaje ha llegado a Mirella y la intensidad del dolor baja. ¿Es casualidad?
Es normal que durante las sesiones individuales de coaching con PNL, disminuya alguno de los síntomas con los que venía la persona. Es un buen indicador de la transformación, pero no el único.
Tú también puedes florecer con PNL