Las personas que me conocen saben que me gusta indagar y profundizar en el conocimiento de la PNL. Esto me lleva a buscar continuamente nueva información, conectar con personas que trabajan en este campo, experimentar con nuevos modelos, siempre con el objetivo de mejorar en la forma de trabajar con PNL.
Esta actitud me llevó a conocer, en enero de 2016, una iniciativa muy interesante:
la NLP Leadership Summit (Cumbre de Liderazgo de la PNL).
Se trata de un proyecto iniciado en 2012 y que se propone establecer un diálogo entre las personas más relevantes en el campo de la PNL para trabajar conjuntamente para un futuro mejor de esta disciplina y una mayor contribución al bienestar humano.
Para formar parte de esta cumbre es imprescindible, entre otras cosas, una experiencia de al menos 15 años como Trainer en PNL.
Eso significa que la inmensa mayoría de sus miembros son personas con una posición destacada en el campo de la PNL. En enero de 2016 yo contaba ya con esa experiencia, así que presenté mi solicitud y fui aceptado.
Reconozco que al principio me asustaba un poco estar en una relación de tú a tú con personas tan expertas. Al mismo tiempo, lo tomé como una gran oportunidad para crecer profesional y personalmente.
Durante dos años he participado en animados debates virtuales, esperando con ilusión la siguiente reunión presencial, prevista para 2018 en Alicante, la ciudad donde vivo.
Finalmente, llegó el tan anhelado momento. Durante los días 12, 13 y 14 del pasado mes de enero, tuve el privilegio de asistir a la NLP Leadership Summit. Éste ha sido el 8º encuentro desde 2012. Y se puede decir que ha sido un encuentro histórico. Haciendo historia en la PNL, y en Alicante, la ciudad donde vivo.
Una de las razones que lo han hecho especial es la cantidad y calidad de los participantes. Hemos asistido unas 80 personas procedentes de 23 países de todo el mundo, entre ellas uno de los fundadores originales de la PNL (Frank Pucelik), algunas personas que estuvieron vinculadas a su desarrollo inicial (Robert Dilts, Terrence McClendon), otras de la primera generación (Wyatt Woodsmall), muchas de las que se incorporaron en la década de 1980, así como 15 líderes prometedores que fueron patrocinados por varios miembros.
Entre los participantes, había asimismo representantes de 14 asociaciones nacionales o internacionales de PNL. Fue una reunión muy, muy especial.
En estas reuniones me he reencontrado con destacados profesionales con los que ya he trabajado anteriormente (Catalin Zaharia, Peter Schütz, Catherine Tamisier).(en la foto Marcel Genestar, Robert Dilts, Mayte Galiana, Catherine Tamisier, Peter Schütz y Josep Soler)
Además de poder saludar de nuevo a Robert Dilts o de conocer personalmente a Michael Hall, con quien vengo intercambiando mensajes desde hace algún tiempo.
Esta cumbre nació inicialmente para responder a una pregunta relativamente simple:
“¿Podemos, las personas que llevamos 15 o más años como trainers o líderes, reunirnos para explorar el futuro que deseamos crear?”
En esa serie de encuentros iniciada en 2012, un grupo de líderes cada vez más numeroso se ha venido reuniendo para profundizar en el mutuo conocimiento y para forjar un tipo de liderazgo compartido, donde cada persona reconoce el liderazgo de las demás.